A esta altura del año, ya gran parte de las empresas tienen cerradas su proceso de planificación financiera o Budget del año 2021, siendo esto uno de los instrumentos más importante para el control de gestión durante todo el próximo año.
Obviamente, los pronósticos económicos para el próximo año son diversos y esto no es un terreno fácil para construir presupuestos.
En este sentido, conviene trabajar con diferentes escenarios (worst case, best case realistic case), o bien, tener a lo menos un plan de contingencia a mano en caso un empeoramiento de la contingencia sanitaria.
Hay dos modalidades para hacer el prepuesto: (1) la tradicional “Top Down” en que la alta gerencia determinar el nivel de in/egresos; y (2) “Bottom Up”, en que las áreas o departamentos elaboran la primera estimación de los números y esto dar pie un proceso de negociación para llegar al presupuesto final.
La segunda opción es mejor, ya que estará basada en estimaciones mucho más reales y al mismo tiempo genera un mayor nivel de compromiso a todo nivel para alcanzar los números.
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